Hostel en un tren.
Por poco y lo dejo ahí mismo. Unos idiotas americanos andan en una gira de lucha grecorromana por la Europa oriental, y caen en el clásico error fílmico de llevarse de las amabilidades de un nativo que tiene motivos ulteriores. Mala reputación para la zona, pero así son las cosas. Uno a uno los mencionados ‘protagonistas’ caen víctimas de unos sádicos con motivos disque altruistas. Para el que la quiera ver, no lo voy a arruinar. Eso sí, prepárense a ver muchísima sangre y mutilaciones. Se les fue la mano en algunos momentos, rayos. Yo normalmente no tengo problemas con cosas así (sólo hay que cantarse el mantra “esa vaina es un muñeco, esa vaina es un muñeco”), pero hasta yo tuve que tragar en seco en momentos.
Thora coge unos cuantos golpes a la cara que yo no sé si yo podría aguantarlos y quedar consciente.
No es mala, pero no la recomiendo.
6 formas-totalmente-estúpidas-de-sacar-a-alguien-de-abajo-de-un-tren de 10.
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