martes, 17 de febrero de 2015

50 Shades Of Grey

Este es de los pocos casos en que con la película tengo más que suficiente, no voy a leer los libros. Nos hemos reído mucho últimamente con las críticas abundantes de los libros y ahora de la película. La historia que surgió de ficción inventada por una fanática del Crepúsculo ha tomado al mundo por los timbales, los ha estirado y les ha dado con un palito chino unos cuantos ramplimazos. Te puedo decir que esa previa y algo cruda descripción es más fuerte que cualquier disparate que pusieron en la peli.
Un billonario con gustos sadomasoquistas intenta entablar una relación con una virginal chica de 21 años. El tiene todo lo que en papel a la generalidad de las mujeres le atrae: dinero sin compasión, buen físico, buen mozo, estilo, ah y mencioné que tiene dinero sin compasión? Bueno, pues eso también. El problema de él es que no le gusta el romance, ni nada que asemeje una relación normal con una chica. El lo que quiere es que la muchacha firme un contrato en el que él pasa a ser el dominante de la relación, y ella la sumisa, y ella tendrá que hacer todo lo que él diga, siempre. Se pasa la película entera persiguiendo a la chica para que firme el contrato, dándole a veces placeres que normalmente él no daría para ver si consigue que ella se decida. Cuando ya ella (y yo) estamos hartos de oír el telelé de que firme el contrato, y que mira mi cuarto lleno de vainas sadomasoquistas, ella le dice "mira pana, tá bien, ya me jartaste. Ven y haz lo que tú consideras que es lo peor que me puedes hacer y yo de ahí averiguo si vale la pena". De todas las incontables formas de sadismo que Christian Grey pudo sacar inspiración, le dio seis correazos en las nalgas con la correa más simple del mundo. Nada más escribiendo aquí se me han ocurrido setenta variaciones todavía más locas, utilizando cualquiera de los cientos de pendejadas que él tiene en ese cuarto, y eso que no soy ‘conocedor’ del tema a profundidad. El público en el cine se quedó como "ya? Y eso era todo el show?", y ella parece que nunca se portó mal porque unos cuantos correazos ni siquiera súper fuertes la pusieron a llorar, y agarró y lo mandó a la mierd. Y ya, se acabó.
No es arruinar película si no hay nada que arruinar. En realidad, me la encontré mejor y peor de lo que anticipaba. El jugo de la historia original fue condensado y filtrado por un guionista y una directora de calidad, así que el resultado final es mucho mejor, al parecer, que el original. A la vez, es aburrida hasta el bostezo porque no hay una trama más que la firma del mencionado contrato.
Los actores son buenos. Me cae muy bien Jamie en el papel de un asesino serial en una serie que he visto, y Dakota tiene un papel idiota pero ella actúa lo mejor que puede ese papel (y claro, salir desnuda miles de veces en una sola película no debe ser fácil). Los otros papeles son rellenados por actores de calibre, en buena parte.
Me seguiré riendo de los comentarios hechos por otras personas, y nadie nos despinta una secuela, aunque dudo que haga tanto dinero como esta ha hecho, ya que la curiosidad del que no quería leer los libros está saciada y en gran cantidad no ha valido la pena.
4.5 mediocres escenas de sadomasoquismo que, ya que todo el mundo sabe a lo que va, debieron acelerar de 10.

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