Esta es la secuela de las aventuras del chico que sufre de una enfermedad que causa que sus nervios no transmitan dolor, y por lo cual él llega a la “lógica” conclusión de que se convertirá en superhéroe. En la primera parte él se tiró a las calles a pelear contra “el mal” y defender al indefenso, uniéndose a otros personajes no menos llamativos que, al igual que nuestro protagonista, se disfrazan como los héroes de paquitos para esconder la identidad. Aquella peli fue divertida y tuvo como bono la actuación que lanzó al estrellato a Chloe, quien creó el memorable papel de la Chica Impacto, una niña con habilidades increíbles para las artes marciales, las armas de fuego, y las peleas extremadamente sangrientas.
En esta nueva película, y utilizando la fama de Chloe, la película dedica casi el mismo tiempo a su Chica que al titular superhéroe. Enemigos creados en la anterior surgirán para darle problemas cada vez más complicados y a veces chocantes (hicieron cosas y mataron personas que no me imaginé sucederían), y la noche no caerá antes que la sangre corra de forma estilizada y exagerada.
La película es buena, y (aunque no lo parezca) como comedia al fin, tiene momentos chistosos. Las actuaciones no son de calibre, sólo funcionan para cumplir con el cometido principal, contar la historia. Una de las ‘leyes’ de hacer secuelas es que todo tiene que ser más grande, más explosivo, más peligroso, más lo que sea. Y esta cumple su cometido.
Si te gustó la primera te gustará esta también.
6.9 aparatos-que-sirven-no-sólo-para-poner-a-los-intimidadores-de-colegio-en-su-lugar,-sino-también-para-arruinarles-la-reputación-con-visuales-inolvidables de 10.
En esta nueva película, y utilizando la fama de Chloe, la película dedica casi el mismo tiempo a su Chica que al titular superhéroe. Enemigos creados en la anterior surgirán para darle problemas cada vez más complicados y a veces chocantes (hicieron cosas y mataron personas que no me imaginé sucederían), y la noche no caerá antes que la sangre corra de forma estilizada y exagerada.
La película es buena, y (aunque no lo parezca) como comedia al fin, tiene momentos chistosos. Las actuaciones no son de calibre, sólo funcionan para cumplir con el cometido principal, contar la historia. Una de las ‘leyes’ de hacer secuelas es que todo tiene que ser más grande, más explosivo, más peligroso, más lo que sea. Y esta cumple su cometido.
Si te gustó la primera te gustará esta también.
6.9 aparatos-que-sirven-no-sólo-para-poner-a-los-intimidadores-de-colegio-en-su-lugar,-sino-también-para-arruinarles-la-reputación-con-visuales-inolvidables de 10.