Un empleado de una compañía de seguros tiene la oportunidad de subir la escalera corporativa, conseguir un nuevo y mejor puesto, si logra impresionar al jefe. El jefe tiene una costumbre maliciosa, en la que los altos ejecutivos deben participar so pena de perder el trabajo, y es una cena anual en su casa en la que cada persona de la compañía debe llevar a un invitado especial. El invitado tiene que ser una suerte de tarado, un estúpido, digamos, que no se de cuenta que lo es. No cuenta nadie que sea inválido o descapacitado física o mentalmente por alguna enfermedad, ya que eso es aun más patético. Debe ser, aparentemente, alguien incapacitado en cierta forma socialmente. Y el motivo es hacer reir al jefe. El que más haga reir al jefe, gana, y por ende, el compañero “cuerdo” que trabaja en la compañía gana estatus y demás.
El protagonista es invitado sorpresivamente a la cena y, aun más impredecible, se topa con un campeón de la estupidez mientras va manejando. El tonto está recogiendo ratas muertas en la calle porque las usa para crear dioramas de escenas famosas, usando roedores (imagínate la Ultima Cena de Jesús pero con 13 ratones).
La peli tiene un tipo de comedia específica, no necesariamente humor negro, más como ese humor incómodo que últimamente está de moda.
A mí no me gustó casi nada. Momentos en que me reí por la total locura del momento, y algunos comediantes que toman su personaje y le dan vida, no arreglan un guión flojo y chistes demasiado tontos. Más triste es que la mayoría de los participantes son, para mí, muy buenos comediantes y he disfrutado con ellos en otras películas. Sin embargo, no parece ser una película mala para todo el mundo. Debes tener el gusto específico para este humor, y siendo las cosas así, conozco personas a las que les fascinó y hasta la compraron.
4 competencias-entre-la-mente-y-el-cerebro-por-dominio-de-las-acciones de 10.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario