Esta es una película acerca de un… no, déjame comenzar otra vez. El protagonista, una mezcla de Sean Penn y Eduardo Norton, es un ladronzuelo que decide robar la mansión de un negociador de joyas. De día el tipo trabaja como carpintero, así que ya sabe de la alarma, la caja fuerte, las vacaciones de los dueños, etc. Esa noche él llega y, con una facilidad al comienzo inexplicable, entra a hacer de las suyas. Con lo que no contaba era con la increíble semejanza entre él y una mosca que acaba de volar directo hacia una telaraña. La noche que le espera a Sean Norton es comparable con cualquier cosa en las películas Hostal o Sierra.
Bien lograda la tensión durante toda la película, con personajes y situaciones creíbles (dentro de una película de horror, al menos), y un villano bien sádico. No hay mucha explicación acerca de los motivos detrás de todo, quizá lo están dejando para una secuela.
Tensa y asquerosamente gráfica en momentos, pero divertida para este tipo de pelis.
8.1 extras-que-contienen-el-mejor-final-alterno-que-he-visto-hasta-ahora de 10.
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