Esta historia está basada en la vida real. Unos cuantos muchachos de California, hijos de gente con dinero, de clase media alta, deciden que quieren vivir la vida extrema de las estrellas de cine y música, etc. Sin ningún talento o trabajo que les procurara fama y/o fortuna, la mejor forma de conseguir sus trazadas metas al parecer involucraba invadir las casas de los ricos y poderosos de la zona, especialmente cuando (información obtenida por medio de los medios sociales) los dueños no se encontraban en sus residencias, y robar artículos que después pasaban como suyos. El plan y las invasiones dieron resultado por un buen tiempo, pero como siempre sucede, sólo se necesita un momento que salga mal para que todo caiga.La película no es mala, aunque sí algo aburrida. Es triste pensar que muchos jóvenes de los Estados Unidos (aunque no sólo de ahí) entienden que se les debe todo, sin trabajar para conseguirlo, sin talento y esfuerzo para ganárselo.
6 de 10.
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