sábado, 7 de mayo de 2011

Megamind

Esta es la historia de un bebé cuyo planeta está a punto de ser devorado por un hoyo negro, y sus padres deciden salvarlo enviándolo en una pequeña nave espacial hacia otro sistema solar, donde pueda crecer y vivir en paz. Es la historia de cómo las circunstancias de la vida también ayudan a forjar la personalidad.
Viene a ser que esa historia tan supermánica es compartida por otro bebé de otro planeta también a punto de ser engullido, y ambos bebés desarrollan una competencia/rivalidad a través de los años durante sus travesías en el planeta Tierra, donde aterrizaron. Nuestro “héroe”, Megamente, es un genio que creció dentro de una prisión de máxima seguridad (ahí fue que cayó la nave) y se considera un súper villano, siempre atentando contra el público en general en diferentes y diabólicamente ingeniosas formas.
Cuando por fin logra vencer a su archi-enemigo con una trampa que ni él mismo se creyó funcionaría, su mundo siempre dedicado a intentar ganar de repente acaba porque ya cumplió su motivo. Y qué hacer ahora?
La película es divertida. Quizá no tan buena como Los Increíbles pero ciertamente en la misma vena. Muchos chistes y varias canciones reconocidas que animan y tienen perfecto sentido en donde están colocadas, hacen que uno pase un buen tiempo. Es la mejor forma de ver a Ferrell sin cansarse.
7.5 cosas-que-le-hacen-falta-a-un-simple-villano-para-ser-un-super-villano de 10.

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